DOMINGO XV DEL TIEMPO ORDINARIO: 13 de julio, 2025
- Del Puerto Noticias
- hace 7 horas
- 2 Min. de lectura

«¿CUÁL DE LOS TRES… HA SIDO EL PRÓJIMO DEL HOMBRE QUE CAYÓ EN MANOS DE LOS BANDIDOS?» Lc 10,36
¿Quien es mi prójimo? La parábola del buen Samaritano pertenece al Evangelio del sufrimiento. Indica, en efecto, cuál debe ser la relación de cada uno de nosotros con el prójimo que sufre. No nos está permitido «pasar de largo », con indiferencia, sino que debemos « pararnos » junto a él. Buen Samaritano es todo hombre, que se para junto al sufrimiento de otro hombre de cualquier género que ése sea.
Podría decirse que el mundo del sufrimiento humano invoca sin pausa otro mundo: el del amor humano; y aquel amor desinteresado, que brota en su corazón y en sus obras, el hombre lo debe de algún modo al sufrimiento.
No puede el hombre « prójimo » pasar con desinterés ante el sufrimiento ajeno, en nombre de la fundamental solidaridad humana; y mucho menos en nombre del amor al prójimo. Debe « pararse », « conmoverse », actuando como el Samaritano de la parábola evangélica.
La parábola en sí expresa una verdad profundamente cristiana, pero a la vez tan universalmente humana. No sin razón, aun en el lenguaje habitual se llama obra « de buen samaritano» toda actividad en favor de los hombres que sufren y de todos los necesitados de ayuda.
La parábola del buen Samaritano está en profunda armonía con el comportamiento de Cristo mismo. Esta parábola entrará, finalmente, por su contenido esencial, en aquellas desconcertantes palabras sobre el juicio final.: « Vengan benditos de mi Padre, tomen posesión del reino preparado para ustedes desde la creación del mundo.
Porque tuve hambre, y me diste de comer; tuve sed, y me diste de beber; preso, y veniste a verme ».A los justos que pregunten cuándo han hecho precisamente esto, el Hijo del Hombre responderá: « En verdad les digo que cuantas veces hiciste eso a uno de estos mis hermanos menores, a mí me lo hiciste ».
La sentencia contraria tocará a los que se comportaron diversamente: *« En verdad les diga que cuando dejaron de hacer eso con uno de estos pequeños, conmigo dejaste de hacerlo ».