XV Domingo del Tiempo Ordinario
- Del Puerto Noticias
- 14 jul 2024
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"ENTRE EL HIJO DE DIOS ENCARNADO Y SU IGLESIA EXISTE UNA PROFUNDA, INSEPARABLE Y MISTERIOSA CONTINUIDAD, EN VIRTUD DE LA CUAL CRISTO ESTÁ PRESENTE HOY EN SU PUEBLO"
Al elegir a los Doce, para introducirlos en una comunión de vida consigo y hacerles partícipes de su misión de anunciar el Reino con palabras y obras (Mc 6, 7-13), Jesús quiere manifestar que ha llegado el tiempo definitivo en el que se constituye de nuevo el pueblo de Dios, un pueblo universal, su Iglesia.
Deja claro que, los Doce no pueden conformarse con predicar la conversión: a la predicación se debe acompañar, según las instrucciones y el ejemplo de Jesús, la curación de los enfermos; curación corporal y espiritual.
Habla de las sanaciones concretas de las enfermedades, habla también de expulsar los demonios, o sea, purificar la mente humana, limpiar, limpiar los ojos del alma que están oscurecidos por las ideologías y por ello no pueden ver a Dios, no pueden ver la verdad y la justicia. Esta doble curación corporal y espiritual es siempre el mandato de los discípulos de Cristo.
Por lo tanto la misión apostólica debe siempre comprender los dos aspectos de predicación de la Palabra de Dios y de manifestación de su bondad con gestos de caridad, de servicio y de entrega.
Pbro. Guilibaldo Villa Dominguez
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